El viento casi sopla aspas en los cocos
Autor: Jairon Severino
El primer proyecto eólico a gran escala que se construye en República Dominicana, que superará en capacidad a todos los demás instalados en la región del Caribe, marcha a buen ritmo. Será de 33 megavatios y la inversión se aproxima a los US$100 millones.
La empresa EGE-Haina es la responsable de colocar la primera piedra. La inversión se hace, entre otras razones, por la convicción de los inversionistas de que en el país se deben buscar alternativas para diversificar las fuentes de energía, pero que no implique la importación de combustibles y por ende la erogación de divisas.
Estimaciones plasmadas en el proyecto establecen que al año habrá un ahorro de 200,000 barriles de petróleo, cerca de US$17 millones si se toma en cuenta un precio promedio de US$80. Un dato que la empresa destaca es que contribuirá a evitar que se lancen 70,000 toneladas de carbono al medio ambiente. Con este proyecto el país podrá acceder a los créditos de carbono.
El impacto económico de la obra se sentirá de forma directa en las comunidades, pues además de los programas de integración de la empresa con los habitantes, el proyecto se convertirá en una atracción turística que atraerá a visitantes. Este hecho, según la descripción del proyecto, requerirá de formación continua en cuanto a cómo manejar el nuevo entorno económico que se presenta.
Una vez construido el proyecto, la energía generada será despachada de primero al sistema por ser la más económica del mercado. En la parte de eficiencia, se estima que habrá entre un 30 y 35% del tiempo de energía. El costo del kilovatio será de 13 centavos. Para la ejecución la empresa debió hacer inversiones en el muelle de Cabo Rojo y de una línea de 56 kilómetros de transmisión para llevar al cruce de Cabral, incluyendo dos subestaciones.
“No somos los primeros del Caribe, pero sí los más grandes. Hay proyectos en Jamaica, Cuba, Guadalupe, Aruba, pero este será el mayor parque de la región”, expresó el presidente de EGE-Haina, Tito Sanjurjo, quien aseguró que el proyecto está en una etapa importante y que su instalación obedece a la atmósfera de confianza que se respira en el sector eléctrico, aunque no dejó de decir que por ser la primera inversión en energía eólica existe algún nivel temor por saber cuáles serán los resultados en torno al retorno, pero además porque se trata de recursos propios de la empresa.
Explicó que la parte correspondiente a la fundación de las bases o zapata está en proceso de formación, lo que indica que están los huecos y el armazón de acero que serán los soportes de las torres.
Retos
El único inconveniente que han encontrado este año es que ha habido mucha lluvia en el sur y ha retrasado algunas etapas de la construcción, pero significó que se sigue avanzando. “Es un paso importante para la empresa y bastante atrevido. Sin embargo, todo va bien y estamos teniendo éxito en el proceso”, dijo. Las torres que soportarán las aspas tendrán una altura de 80 metros y una vez montadas las estructuras llegarán a 120 metros, lo que las hará más altas que Acrópolis, que mide 108 metros de altura.
Estos datos indican que hasta las puntas de las hélices será aproximadamente un edificio de 30 pisos. EGE-Haina espera seguir con la construcción de otros proyectos similares para ayudar en la diversificación energética.
PESO DE LAS PARTES SOBRE LAS TORRES
Detalles
Tito Sanjurjo explicó que las partes que van sobre la torre están construidas con un peso de 80 toneladas, lo que da una idea de la carga que soportarán las torres. Para levantar la estructura vendrá una grúa especial, “y ojalá mantenerla un tiempo más en el país para construir algunos parques más”.
El proyecto completo contará de 19 torres, 14 en el parque Juancho-Los Cocos, Pedernales, y cinco del Quilvio Cabrera, ex director del Instituto Agrario Dominicano (IAD), quien diligenció los terrenos para el proyecto.
La tecnología es desarrollada en Europa, por la danesa Vestas, y el ensamblaje es en España, mientras que la parte de ingeniería civil son materiales dominicanos, incluyendo los ingenieros.
“Hemos hablado mucho del tema de la energía eólica y en el caso de nuestro proyecto creemos que es un hecho muy importante no sólo para EGE-Haina, sino para el país. Este es el primer gran proyecto a gran escala que se construye en República Dominicana”, explico Sanjurjo.
Mejoría del servicio
“Cuando la población paga la energía eléctrica se crea una conciencia generalizada y se estima que el consumo baja un 40%, lo cual sucede en todos los países”, afirmó el presidetne de EGE-Haina, Tito Sanjurjo, quien señaló que así ha sido en todos los países en los cuales se ha ejecutado un programa contra el robo y de eficientización de la electricidad.
“Decir que el país necesita mayor generación es cierto. Necesitamos diversificar nuestro parque de generación. La mezcla hay que cambiarla”, dijo.
Fuente: Listin Diario
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